Las invasiones de terrenos en varios distritos de Lima, son una de las principales problemáticas con las que se tiene que lidiar en nuestra sociedad y como medio para contrarrestar dicha situación, se congregaron alrededor de 50 voluntarios para sembrar aproximadamente 250 árboles en las lomas del Paraíso, en el distrito limeño de Villa María del Triunfo. La tara y molle costeño, plantas nativas fueron las especies con que se reforestó la zona, debido a su fácil adaptación a este tipo de suelo.
En las últimas décadas, se ha observado un crecimiento desmedido de unidades habitacionales en las periferias de la ciudad, producto de la migración interna, lo que ha originado el fenómeno de la expansión urbana. Como consecuencia, surgen las viviendas que son construidas sobre terrenos ilegales, es decir, producto de invasiones. Este fenómeno se observa en varios distritos de Lima Metropolitana, donde el crecimiento poblacional es de 2.4 y la densidad de 2,511.2 km2, ambos indicadores del grado de concentración de población.
Sin embargo, en la capital peruana existen más de 70,000 hectáreas de lomas por “explotar”, ubicadas desde Ancón hasta San Bartolo en el Sur, involucrando a 19 distritos. Muchos de estos ecosistema – sino se actúa de manera inmediata- se encuentran en peligro de extinción debido a la excesiva invasión de terrenos. Hay dos opciones viables para evitar que esto siga sucediendo: ecoturismo y reforestación.
Las lomas costeras son un ecosistema único en el mundo por su vegetación efímera que se desarrolla gracias a las nieblas invernales, entre los 200 y 1000 m.s.n.m. en promedio. Su importancia está ligada a la provisión de aire limpio, regulación del clima, captación de agua atmosférica, su uso ganadero y agrícola, su valor recreacional y paisajístico, entre otros valores relacionados.
En relación a Ecoturismo, algunas municipalidades, organizaciones vecinales y agencias de turismo, convocan a la población a realizar caminatas por estas lomas, aprovechando la temporada húmeda de la garúa y neblina. Entre las más conocidas y cercanas a Lima están: las lomas de Lúcumo, Mangomarca, Carabayllo y las de Villa María. En Villa María del Triunfo, las lomas que se aprecian también son conocidas como Paraíso, por encontrarse cerca de los asentamientos humanos Paraíso y Edén del Manantial. Son de las más extensas de Lima, aunque sus 1700 hectáreas son amenazadas por los invasores de terrenos.
Además de crear y conservar un pulmón verde para los asentamientos humanos aledaños a las lomas y para evitar que continúen las invasiones, algunas asociaciones sin fines de lucro como ALEV (Asociación de Líderes de Educación Verde), con ayuda de voluntarios y vigilancia de vecinos han encontrado como manera efectiva y productiva de contrarrestar esta situación, reforestar, es decir, invadir con árboles. Así mismo, de esta manera se están conservando estos hermosos e importantes ecosistemas que albergan una gran diversidad de flora, entre ellas la flor de Amancaes, representativa de Lima y en fauna, es la temporada para gozo de las vizcachas, zorros y caracoles, entre otros.
La reforestación es la única solución a estos males. Hoy en día no solo tenemos que afrontar como principal problema las invasiones, hay uno mucho más preocupante que está ocupando la agenda: el cambio climático y ya es tiempo de actuar.
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